Octubre 14, 2021
La alergia es una enfermedad bastante común en perros y en gatos, en la que el sistema inmunitario de las mascotas (las defensas), reaccionan de una manera descontrolada a la presencia de agentes como alimentos, ácaros, pulgas, polen o fármacos, a los cuales se les llama alérgenos. Estas alergias se expresan cuando estos alérgenos entran en contacto con el animal por varios medios como por la piel (los ácaros, las pulgas), inhalándonos (polen), o ingiriéndose (alimentos o fármacos).
En esta estación primaveral, la más importante en los perros -y en menor proporción en gatos- son por la inhalación del polen, y se manifiestan en nuestras mascotas, principalmente, con problemas cutáneos, lo que también se conoce como dermatitis atópica. Algunos de los síntomas que alertan este problema son:
- Prurito intenso en todo el cuerpo
- Enrojecimiento del abdomen, cara, orejas
- Piel engrosada o grisácea
- Alopecias secundarias por el prurito (sensación desagradable de rascarse)
Entre los alérgenos más frecuentes encontramos el polen, los hongos y los ácaros, y para realizar un correcto diagnóstico de alergia, es el veterinario quien debe examinar a la mascota, para descartar la presencia de otras enfermedades que puedan producir síntomas muy parecidos, como sarna, infecciones de piel o reacciones adversas al alimento.
“Cuando todos estos problemas hayan sido descartados por el profesional y, si la sintomatología persiste, se debe realizar un diagnóstico definitivo con la ayuda de pruebas complementarias como lo son los test intradérmicos o test serológicos, para llegar así a realizar el tratamiento específico (inmunoterapia)”, comenta Diego Rugeles, Veterinario de Poema, y experto en alimento para mascotas.
Es importante no realizar ningún tipo de tratamiento en casa con nuestras mascotas, ya que el origen de la reacción alérgica debe ser diagnosticado por veterinarios y así, poner fin a la causa que puede ser cualquiera de las descritas anteriormente.