Abril 20, 2023
Según estudios globales de la Organización Mundial de la Salud (OMS) más del 80% de la población adolescente no es lo suficientemente activa. El año pasado, Chile se posicionó en el quinto lugar de las naciones menos activas a nivel general, en un reporte sobre los niveles y tendencias de la actividad física de niños y adolescentes en 57 países.
Un ranking preocupante, cuando hay consenso entre los especialistas en salud de que la práctica sistemática de actividad física y deporte trae importantes beneficios en todas las edades, y que un niño obeso, probablemente será un adulto obeso, afectando negativamente la vida de una persona.
Por eso la relevancia de inculcar este hábito desde pequeños. “La actividad física ayuda a la autorregulación, trabajo en equipo, desarrollo de habilidades sociales, a jugar con el otro y para el otro y, obviamente, al desarrollo de las habilidades motrices (locomoción, manipulación y equilibrio) más las habilidades de percepción motrices (conciencia de percepción corporal, de mi cuerpo, espacio y de los demás)”, señala Susana Espinoza, Jefa del Departamento de Deportes y Educación Física de The Greenland School, perteneciente a la red Cognita.
Sin embargo, para la especialista, más que hablar de “hacer deporte” desde pequeños, lo correcto es incentivar a los menores, a través del juego, el desarrollo de las habilidades y de la actividad física. “Para que un niño sea apasionado por el deporte, primero debe ser apasionado por la actividad física, el moverse, por correr y saltar. El moverse es más importante que el deporte en sí mismo. El niño de esta manera pasa a ser un ser social”, explica Espinoza.
Aun así, muchas veces esa pasión no se despierta en edades tempranas o se desarrolla más en un género que en otro. Según un estudio publicado por GfK Adimark, el 26% de las niñas entre 10 y 17 años no realiza deporte habitualmente, mientras que en los niños la cifra llega sólo al 7%.
Ante esta realidad, el llamado es a estimular más que obligar, pues “la base del deporte es el juego y para un niño pequeño, establecer reglas del deporte puede ser frustrante. Primero debe encantarse con jugar y luego de acuerdo con sus habilidades, encauzar el deporte más apropiado para él”, plantea la docente The Greenland School, colegio que convive regularmente con el deporte, ya que cuenta con cinco selecciones deportivas. Además, Susana realza la importancia de involucrarse en la actividad con el niño, pues éste imita. “Si ve al papá acostado, es poco probable que se quiera mover”.
Así, en un mundo con tantas alternativas, ¿cómo darse cuenta si tu hijo posee habilidades físicas? “Cuando es capaz de resolver cosas a través de la creatividad para hacer diferentes tareas motrices, por ejemplo, si toma un balón y él o ella crea la forma de jugar. Cuando es propositivo ante una actividad”, explica. Y es que el deporte y la actividad física son una herramienta fundamental en el desarrollo de la persona, entregando valores como la responsabilidad, el trabajo en equipo, el respeto y una condición de vida saludable.