Marzo 31, 2023
Durante todo el año nuestra piel está expuesta a diversos factores ambientales que ejercen efectos positivos y negativos en ella. Con el calor, la integridad de nuestra piel puede verse afectada por factores ambientales y químicos, por eso aquí te contamos cómo proteger la piel de estas agresiones.
Durante esta época estival la exposición al sol nos beneficia ya que permite a nuestro organismo sintetizar Vitamina D pero, por otro lado, puede ser peligroso si la piel está expuesta en exceso y sin protección. Además, las altas temperaturas aumentan la sudoración provocando que nuestra piel pierda agua, se deshidrate y se descame más fácilmente, lo que conduce a un desequilibrio en la barrera cutánea que cumple un rol fundamental de protección frente a los agresores externos.
Por lo general, el verano significa actividades al aire libre, pero con las salidas vienen los peligros asociados con la contaminación del aire y el agua. Esto conduce a la aparición de signos de envejecimiento prematuros, pérdida de vitalidad y luminosidad. Por otro lado, los sistemas de aire acondicionado al que nos exponemos diariamente también afectan ya que reducen la humedad del ambiente, lo que produce desequilibrio en la barrera cutánea y acaba resecando la piel. Y lavar con demasiada frecuencia la piel puede causar sequedad excesiva e irritación, además el uso de jabones agresivos puede destruir la barrera protectora.
Después de las vacaciones, y en vísperas del cambio de estación, es normal comprobar estos efectos en la piel, por ello es muy necesario retomar hábitos saludables para devolver la hidratación y vitalidad. Algunos de ellos son:
- Seguir una nutrición saludable
- Practicar deporte con regularidad
- Dormir entre seis y ocho horas al día
- Evitar el consumo de alcohol y cigarro
- Adecuada rutina del cuidado de la piel
Según la experta Carla Ibarra, Química Farmacéutica de CeraVe, la clave para una buena rutina de cuidado de la piel comienza por el cuidado del rostro, es importante la constancia, y apoyarse con productos indicados para cada necesidad.
Para hacerlo, el primer paso es utilizar un limpiador que se adapte a tu tipo de piel. Por ejemplo, si tienes la piel grasa o mixta, utiliza un limpiador que ayude a retirar el exceso de sebo sin resecar como el Gel limpiador espumoso de CeraVe ($9.990).
Si tu piel es más bien seca, un limpiador que ayude a hidratar será la mejor opción. Concretamente, el Limpiador crema-espuma hidratante de CeraVe ($10.990), que limpia, hidrata y elimina el maquillaje sin alterar la barrera protectora de la piel, y su textura cremosa genera espuma al masajear.
Los limpiadores deben aplicarse con movimientos circulares, delicadamente y enjuagar siempre con agua tibia.
El segundo paso de la rutina de cuidado facial es aplicar un hidratante, como la Loción hidratante de rostro AM con FPS 25 de CeraVe ($11.990) que hidrata la piel con sus 3 Ceramidas Esenciales y Ácido Hialurónico, mientras protege la piel gracias a su tecnología de protección solar FPS 25 de amplio espectro UVA y UVB.
También es importante hidratar nuestro cuerpo, para ello, si prefieres texturas cremosas, puedes ocupar la Crema hidratante CeraVe ($13.990) con su fórmula nutritiva que mantiene la piel hidratada por 24 horas; y si buscas texturas más ligeras, la Loción hidratante de CeraVe (desde $8.990) puede ser una buena elección, ya que su fórmula liviana y de rápida absorción devuelve la hidratación y restaura la barrera cutánea.
Los productos CeraVe están a la venta en farmacias a lo largo de todo el país.